Sociedad en Fahrenheit 451

Sociedad en Fahrenheit 451

     En la novela Fahrenheit 551 del autor Ray Bradbury se representa una sociedad censurada y supuestamente feliz en que se le hace creer a la gente que los libros no son importantes y que todo lo que dicen en ellos es totalmente "loco". La sociedad se entretiene con "robots" que aparecen en pantallas de televisión y creando chismes sobre las personas que son distintas a ellas. Esta novela muestra que nuestra sociedad no está muy lejos de esto con toda la tecnología nueva. En este ensayo se analizará los aspectos de la educación, los medios de comunicación, la cultura y la ausencia de memoria y de la historia, colaboran a la construcción de una sociedad anestesiada y sin pensamiento crítico.

     Uno de los aspectos más importantes de la sociedad de Fahrenheit 451 es la censura. Esta empieza a cambiar después de la Guerra Civil. Las personas están censuradas en cuanto a libros o un libre pensamiento, ya que solo sabe lo que le dicen los medios de comunicación. El gobierno piensa que si la gente tiene distintos pensamientos se van a pelear más y no ayuda a mantener la paz. En cambio, si les sacas los libros y se les dice lo que tienen que pensar, son más fáciles de controlar y no hay nadie que se rebele contra ellos. El personaje Beatty lo explica muy bien:

"Atibórralo de datos no combustibles, lánzales encima tantos <<hechos>> que se sientan abrumados, pero totalmente al día en cuanto a información. Entonces, tendrán la sensación de que piensan, tendrán la impresión de que se mueven sin moverse" (Página 71)

     Entonces, como la gente no sabe mucho de historia, guerras y problemas políticos, son mucho más fáciles de manipular para quienes mandan a quemar libros y a quemar la historia.

     Otro aspecto importante de la novela es la educación. Está presente desde los primeros años del individuo y está preparada para poder manipular a la gente fácilmente. En la escuela, no les enseñan nada que tenga que ver con libros, sea filosofía, literatura, etc. Se basan en actividad constante para cansarlos hasta el punto en el que no pueden hacer nada más que dormir:

"Una hora de clase TV, una hora de baloncesto, de pelota base o de carreras, otra hora de transcripción [...] y más deportes. [...] Nos fatigan tanto que al terminar el día, solo somos capaces de acostarnos..." (Página 39)

     De esta forma, consiguen lo que quieren, una sociedad pasiva que no tiene permitido preguntar ni cuestionar. Lo único que hacen es escuchar.

     Por ultimo, los medios de comunicación influyen mucho. Es una de las formas principales de censura y manipulación del gobierno. Los televisores pasaban lo que les parece importante para esa sociedad. Pasan noticias, pero también obras y cuentos que habían estado en libros, pero ahora los actúan y aparece en la tele. Un ejemplo de noticia es cuando persiguen a Montag:

"Conectó el aparato. [...] - Guy Montag. Sigue en libertad. los helicópteros de la Policía le buscan. [...]

Sabueso Mecánico nunca falla. Desde que fue usado por primera vez para perseguir una presa, este invento increíble no ha cometido ni un solo error." (Página 144)

     Esto demuestra que solo importa el demostrar qué le pasa a las personas si se rebelan contra el sistema.

     En conclusión, esta sociedad es insensible, reprimida e infeliz porque censuran a la gente, tienen una mala educación, su entretenimiento está planeado para manipular y borran la historia para que no sepan quienes son. Esto no está muy lejos de la nuestra, ya que la tecnología nos está consumiendo y estamos dejando de lado a las personas diferentes a nosotros y "raras".

Oliver Twisto

   En Inglaterra vivía un niño de doce años llamado Oliver Twisto. Él vivía en Tottenham con su padre alcohólico que abusaba de él. Su madre había muerto al parir a Oliver, una de las razones por las que el padre de Oliver, Francis, lo odiaba. Su casa se encontraba en un barrio pobre, lejos de la ciudad. Francis hacía trabajar a su hijo en una panadería, mientras que él se quedaba en su casa, bebiendo alcohol. Pero como era la revolución industrial, cada vez el negocio decaía alarmantemente más rápido. En consecuencia, Oliver perdió su trabajo, dejando a su papá y a si mismo sin comida. Francis, al enterarse de la noticia, lo maltrató a Oliver, tirándole botellas vacías y libros viejos. Fue entonces cuando Oliver decidió escapar de casa.

   Cuando llegaron las dos de la mañana, agarró una maleta con su ropa y el dinero ahorrado que tenía. Salió de su casa y se fue para el sur, en busca de algún hombre andando en caballo que fuera en dirección a Londres. Después de estar caminando por dos horas, se encontró con un hombre a caballo y le preguntó si podía llevarlo a la ciudad. El hombre le dijo que sí, ya que esa era justamente a la dirección en la que iba. Tardaron una hora en llegar, ya que al ser las cuatro de la mañana, no había mucha gente. El hombre, que se llamaba Jack, paró el carro a las afueras y le dijo a Oliver que siguiera caminando que llegaría al centro de Londres.

   Como Oliver no tenía ningún plan, se dio cuenta de que necesitaba un trabajo o tendría que empezar a robar. La plata que tenía era poca y no había traído comida. Después de caminar por las calles principales, se encontró con un grupo de seis niños que estaban robándole al panadero sin que este se diera cuenta. Los niños parecían tener entre diez y dieciséis. Como no tenía nada que hacer por el momento y estaba aburrido, Oliver decidió seguirlos. Caminaron unas cuantas cuadras hasta que doblaron en un callejón estrecho. Al doblar, Oliver se dio cuenta de que habían armado una especie de casa con cartones, chapas y madera.

- ¿Qué haces aquí? - dijo el niño

- Me perdí en las calles y decidí seguirlos para que me ayuden – le respondió Oliver.

   Uno de los niños mayores se acercó y le dijo que se fuera, que lo ayudara otra persona porque ellos no tenían idea. Un poco decepcionado, Oliver salió del callejón a la calle y decidió buscar trabajo. Estaba tan distraído que no se dio cuenta de que un hombre se había parado al lado suyo. Cuando Oliver se dio vuelta, se dio un susto al ver al señor, que se rió, y luego se presentó como Patrick. Le contó que estaba buscando a personas pequeñas para que trabajaran con él de deshollinador y que limpiara las chimeneas. Oliver, feliz de haber encontrado trabajo tan rápido, aceptó la propuesta. Patrick, entonces, le preguntó dónde vivía y dónde estaban sus padres, ya que requería su permiso. Oliver le mintió y le dijo que sus dos padres estaban muertos y que no tenía un hogar.

   En ese momento, Oliver se dio cuenta de que su mentira no era muy eficiente, por qué Patrick le preguntó porque no estaba en un orfanato. Como se quedó sin palabras, Patrick agarró a Oliver del brazo y lo llevó al orfanato de Sunnyside. Oliver tenía una imagen horrorosa de su padre y tenía miedo de que le pasara de vuelta.

   Al llegar, una mujer que parecía amable, lo dejó esperando en un cuarto vacío mientras ella hablaba con Patrick. Después de cinco minutos, la mujer le dijo que, de ahora en más, se iba a quedar en el orfanato hasta que encontraran una familia para él.

   Dos años más tarde, una pareja que no podía tener bebés entró a Sunnyside en busca de un hijo. Después de conocer a todos los niños, decidieron adoptar a Oliver, que ya tenía dieciséis años. Oliver estaba muy asustado pero a la vez, aliviado de poder salir del orfanato. La primera semana fue difícil, ya que Oliver era muy tímido, pero al pasar el tiempo Oliver se pudo acomodar en su nueva familia y crecer el resto de su vida feliz.

La peor noche para Katherine Langford 

Pasó un momento incómodo en la alfombra roja de los Golden Globes 

Este domingo pasado, en los octogésimos premios Golden Globes, muchas personas fueron testigos de la vergonzosa llegada de la actriz Katherine Langford, quien estaba nominada al premio de Mejor Actriz por su serie “El Tiempo”.

Este año, los Golden Globes se realizaron en el Microsoft Theatre en Los Ángeles. Muchos y muchas actores y actrices presenciaron los premios, como Millie Bobby Brown y Ewan McGregor. Fueron vistos por más de 26 millones de personas, ya que es un evento muy anticipado.

Katherine Langford en la Alfombra Roja 

Pero Katherine podría llamarla una de las peores noches de su vida, porque al llegar a la alfombra roja, a las 8:35, se le enganchó su hermoso vestido en la puerta de la limusina. El vestido terminó prácticamente en el piso, junto con su dignidad, ya que la actriz quedó casi totalmente desnuda.

Los paparazzi se apresuraron a llegar lo más rápido posible, como un perro al ver comida, tratando de sacar fotos de ese momento tan vergonzoso. Su novio trataba de cubrirla lo más que podía con el saco de su traje, pero ya era tarde; las fotos ya estaban en todas las redes sociales.

De todas formas, Katherine se compuso rápidamente y, junto con el chofer, trataron de desenganchar el vestido costoso de Gucci. Probablemente, el vestido valía más que el sueldo del hombre.

Como si la noche no pudiera empeorar aún más, Langford posó en las fotos luego del incidente, sin darse cuenta de que su ropa interior estaba expuesta a las cámaras. Los paparazzi tampoco decidieron ser muy amables, y continuaron sin decírselo.

Un testigo que estaba adentro del teatro contó que, al llegar a su mesa dentro del teatro, vio que Katherine estaba discutiendo energéticamente con su publicista. Al rato la vio yendo para los baños, seguramente para arreglar el vestido y su apariencia. Se veía preocupada y nerviosa.

Cuando llegó la hora de que se presentara la categoría de Mejor Actriz, se la veía muy nerviosa, dicen testigos, hasta un poco pálida. Pero cuando anunciaron que ella había ganado el premio, le cambió la cara completamente. En el medio de su discurso, en el cual estaba agradeciendo a su madre, un productor de los premios le pidió disculpas después de admitir que se habían equivocado de nombre, que en realidad la actriz que había ganado era Saoirse Ronan. Katherine, entonces, tuvo que entregar el premio a la actriz y volver a su asiento.

Sin duda, fue la peor noche para Katherine Langford.

Cecilia Cecotti, médica de emergencia.

Entrevista a médica de Emergencias Claudia Cecotti



¿En qué consiste la medicina de emergencia?
La medicina de emergencia se ocupa de atender a los pacientes que tienen una enfermedad aguda que puede ser leve, moderada o grave.

¿Por qué decidiste estudiar medicina?

Primero porque admiraba la gente que hacia esa tarea y después a lo largo de los años me di cuenta de que mediante esa actividad, haces algo por el otro. Es una actividad muy social darle algo a la sociedad.

¿Cuántos años tuviste que estudiar para poder empezar a atender pacientes?

En la época que yo empecé, la carrera duraba seis años. Estudié en la UBA, apenas termine la secundaria, y estudie ahí los seis años. Era un poco más corta de lo que es ahora. Después de esos seis años, me recibí y empecé con la especialización de terapia intensiva que duró tres años más. La verdad es que nunca terminas de estudiar, siempre estás estudiando. Después hice otra especialización más, pero vos podes empezar a trabajar ni bien tenés el título. De todas formas son necesarias las especializaciones porque para trabajar en el terreno, no es suficiente con los teóricos que adquirís en la universidad.


"Nunca terminas de estudiar"


¿Tenes alguna anécdota fuera de lo común, una enfermedad rara, un momento especialmente feliz o especialmente frustrante?
Como yo he trabajado muchos años en terapia intensiva, hay muchos momentos que son extremos o muy buenos. Rescatas a alguien de una enfermedad muy severa que está a punto de morirse y no se muere, termina viviendo, ese es un momento feliz. También está la contracara de eso porque como son enfermedades en pacientes críticos con riesgos de morirse, algunos se mueren. La parte más triste y difícil es comunicarle a la familia.

¿Cómo es un día de trabajo?

Varía de acuerdo a la especialidad que haga el médico. En general, va de aquí para allá a un montón de lugares y no tiene un solo trabajo, sino que tiene varios. Estas desplazándote: vas a una guardia de veinticuatro horas, un hospital, etc. Depende de donde trabajes. Podes trabajar en un ambiente público o en el ambiente privado. En el público, son básicamente las unidades hospitalarias o los hospitales, primer o segundo nivel. En el privado, son las clínicas o consultorios privados.

Si haces terapia intensiva, es una vida de emergencias. Estas siempre en alerta. Mucha gente trabaja muchísimos años haciendo guardias que son sin duda muy difíciles porque como tenes que estar veinticuatro horas, la atención va bajando a lo largo de las horas y no es la misma capacidad que tenes cuando inicias la guardia de cuando la terminas. Al día siguiente, es prácticamente todo el día descansando.



¿Cuáles pensas vos que son las ventajas y desventajas de tu trabajo?

La ventaja es que es una linda profesión y los temas que tenes que estudiar son muy atractivos porque estudiar y trabajar sobre el cuerpo humano es muy interesante. También es muy interesante los descubrimientos que se hacen. El medico en general es valorada por la sociedad por más que en los últimos años se ha deteriorado un poco.

Las desventajas también son muchas. No está bien remunerado, las horas de trabajo para el médico que hace una guardia es excesivo trabajar veinticuatro horas porque no se puede sostener la atención durante tanto tiempo. En particular, este es un país donde el médico tiene que tener siempre más de un trabajo. En cambio, en otros países los médicos tienen un solo trabajo como lo que debería ser normal.


Si tuvieras que elegir otra especialidad en la medicina, ¿Cuál sería?

Me dedicaría a pacientes más sanos, no tan críticos. Quizás haría algo de nutrición o de medicina del deporte.

El rito de iniciación en el futuro

El rito de iniciación en el futuro

     En la sociedad del futuro, me imagino que como ya no va a haber etiquetas en cuanto a los tipos de sexualidad, va a haber solo un rito para todos. No habría una división de hombre y mujer.

     El rito sería fácil de aprobar. Consistirá en hacer tres pruebas distintas

     En la primera, se trata de ver como reaccionarían los jóvenes es una situación de violencia ya que esta sociedad es pacifista.

     En la segunda, los adolescentes son puestos frente a un árbol talado. El objetivo es observar como reacciona, si planta otro o ignora la situación.

     En la tercera prueba, hacen que el adolescente este una situación molesta para la persona, y si tiene la paciencia suficiente, aprueba.

     Este rito se hace una semana después de su cumpleaños número 18. 97% de las personas aprueban el rito y el 3% solo necesita una segunda vez para aprobar.

Fuego

- ¡Tío, contanos una historia!- dijeron mis sobrinos.


- Bueno, les contaré la historia de mi amiga Lucy y mi hermana Melanie.






Conocía a Lucy desde que tenía dos años, crecimos juntos en Haxby porque era mi vecina. Hasta que se mudó cuando teníamos doce. El día anterior pasó algo que me marcó para el resto de mis días.


Estábamos sentados en el patio de mi casa, mirábamos las estrellas y las nombrábamos una por una. Lucy sugirió que comiéramos, teníamos hambre. Entramos para buscar algo, pero no había nada. Le dije que fuéramos al supermercado juntos, pero ella decidió quedarse.


Estaba volviendo a mi casa, cuando de pronto, oí unos gritos de auxilio: era Lucy. Corrí lo más rápido que pude hasta que la encontré cerca de mi casa, asustada. Caminó hacia mí y empezó a llorar. Luego vi lo que había detrás de ella: mi casa estaba en llamas, fuego por doquier, arrasando con todo a su paso... Y entonces, recordé: Melanie. Tenía que entrar a ver si estaba allí, pero cuando llegué, era muy tarde. La casa se había derrumbado. No sabía qué hacer, entré en pánico, grité por ayuda lo más fuerte que pude, pero nadie parecía escuchar. No podía creer que mi hermanita probablemente estuviera muerta. Vinieron los bomberos y apagaron el fuego.


Al día siguiente, nos mudamos a otra casa, sin Melanie y con Lucy a miles de millas de distancia.






- ¿Ya terminó la historia tío?


- No, queda mucho que contar.






Cuando cumplí los dieciséis años, decidí ir a una universidad cerca de Haxby. Mientras estaba en la fila esperando para inscribirme, me encontré con Lucy. Ella había comprado una casa en el mismo terreno de mi anterior hogar y me ofreció quedarme allí. Acepté.


Unas semanas después de que ingresamos a la universidad, empezaron a sucederle cosas extrañas mientras estaba sola: se quemaban objetos por toda la casa. Al principio, no sucedía tan seguido, pero con el correr de las semanas, era constante. Todos los días, Lucy me decía que cuando yo no estaba, la casa se convertía en un infierno. Contaba que parecía que la odiaba, que se quería mudar conmigo a otro lugar. Lo curioso era que nada ocurría cuando estaba yo. No veía una razón por la que hubiera que mudarnos. Estaba asustado por Lucy: se estaba volviendo loca.





Unos días después, Lucy me contó que escuchaba voces, que la culpaban de haber matado a Melanie.


Al día siguiente, vio que se reflejaba el rostro de mi hermana en los espejos. Hasta que un día llegué a casa y Lucy empezó a llorar y a decir que lo sentía, que no podía ocultarlo más.


Me contó que ella había matado a mi hermana. Estaba celosa de su aspecto, de su risa, de cómo yo la miraba con amor y admiración, de cómo pasaba los días enteros con Melanie y no con ella. Así que Lucy prendió una vela y la dejó caer, quemando la alfombra que cubría el piso de nuestra casa. Las lágrimas que había llorado aquella noche y los gritos de agonía habían sido falsos.


De pronto, se cortó la luz y la oscuridad llenó el lugar. Prendí una vela y la sostuve en frente de mí, pero noté algo extraño: Lucy no estaba. De repente, una luz salió de mi cuarto y, sin siquiera darme cuenta, estaba subiendo las escaleras hacia esa horrible habitación. Abrí la puerta con mi mano temblorosa y pude ver una silueta oscura en el cuarto débilmente iluminado. Acerqué la tenue luz y vi a Lucy en una lúgubre esquina. Estaba arrodillada en el suelo, todo su ser temblaba y su cabello negro estaba suelto, cubriendo su rostro. Lo alzó dejando a la vista sus ojos y murmuró:






- No puedes salir de aquí ahora que sabes la verdad.






Empecé a correr lo más rápido que pude, pero escuchaba los pasos de ella que me seguían. Tenía tanta adrenalina en mi cuerpo que no sentía el dolor cuando chocaba contra las paredes. Tenía que detenerla. Entonces me di vuelta y, cuando Lucy se abalanzaba sobre mí, arrojé la vela que llevaba en mi mano. Su cuerpo empezó a quemarse lentamente y, mientras ella agonizaba, volvía a su forma humana. Antes de que se quemara por completo, apagué el fuego, dejando a Lucy inconsciente en el piso. Pensé en los años de felicidad que había sentido con ella y decidí que no la podía dejar ahí. La lleve al hospital y me fui. Esa fue la última vez que la vi.





Decidí mudarme y dejar a Lucy en Haxby. Me transferí a la universidad Xavier en Estados Unidos para terminar de estudiar.






- ¿Y qué pasó con Lucy, tío Frank?- preguntaron mis sobrinos.





- No lo sé chicos, no lo sé.

La Verdad de Cenicienta

     Todos conocen la historia de Cenicienta. Ella baila con el Príncipe y se enamora al instante, ella se escapa de él y luego el Príncipe la encuentra. Después deciden casarse y vivir felices para siempre. Pero la historia no está completa, le falta una parte. 

     El día del casamiento empezó muy bien. Todos en el castillo del Príncipe estaban emocionados por la boda, excepto Cenicienta. Ella pensaba que no estaba lista para casarse y quería estudiar en la Universidad de Fantasía. Eso no significaba que ella no lo amaba. Solo necesitaba tiempo para estudiar y graduarse y no sabía cómo contárselo al Príncipe sin que le rompiera el corazón.

     A cuatro horas de la boda, Cenicienta decidió que le iba a mandar una carta a su amado para posponer la boda y mudarse cerca de la Universidad, a la que ella quería ir. Le pidió ayuda a su Hada Madrina para mandarle la carta por una paloma e irse del castillo. Hizo una valija con todas sus cosas y se despidió de la vieja mujer.
     Cuando estaba por subirse a la carroza, salió el Príncipe del castillo. Cenicienta se sorprendió y le preguntó qué estaba haciendo. El le dijo que se casase con ella y que podía hacer la Universidad por Internet. En ese momento Cenicienta se dio cuenta de que ella no podía vivir sin él.